Necesitamos encontrar soluciones ante las sequías y el cambio climático. Por eso, un nuevo proyecto de está apostando por la tecnología CRISPR-Cas para hacer más resistentes cultivos como el tomate y los cítricos.
Un equipo de científicos ha conseguido reparar una mutación natural en el tomate utilizando la edición genómica, lo que permite obtener frutos maduros y cosechar antes. Todo un avance para mejorar la producción.
La Caja Fuerte Global de Semillas de Spitsbergen alberga más de 930.000 variedades de cultivos de todo el mundo. El objetivo es protegerlas del cambio climático y las tensiones políticas para asegurar el futuro de la agricultura.
Corteva, una empresa de tecnología agrícola, ha anunciado que invertirá 25 millones de dólares en Pairwise, especializados en edición genética. Ambas empresas desarrollarán cultivos más resistentes ante el cambio climático.
A Teodoro le han modificado un gen que los investigadores creen que desempeña un papel clave en la fecundación. Con él, pretenden investigar y entender por qué detrás de los fallos reproductivos en animales de granja.
Cultivos como las berenjenas o las zarzamoras han desarrollado con el tiempo un mecanismo de defensa que las protege de los herbívoros: las espinas. Ahora, un nuevo descubrimiento científico ha dado con la clave para eliminarlas.
El plátano es una de las frutas más consumidas en el mundo, pero su supervivencia está amenazada por un hongo. Varias empresas están trabajando con la edición genética para prevenir esto.
En Japón, ya pueden disfrutar de tomates capaces de combatir la hipertensión. Han sido modificados genéticamente para aumentar hasta cinco veces la cantidad original de GABA, un aminoácido que reduce la presión arterial.
Científicos del IAS-CSIC han desarrollado una variedad de trigo sin gluten utilizando las nuevas técnicas de edición genética. Gracias al CRISPR lograron eliminar la toxicidad del gluten, técnica que la CE ha propuesto regular.
La Comisión Europea ha propuesto regular las nuevas técnicas de edición genética para mejorar la resistencia climática y combatir enfermedades y plagas. Modifican el genoma de la propia planta o introducen material equivalente en su ADN.
