Las explotaciones agrivoltaicas están emergiendo como una solución innovadora en la lucha contra el cambio climático, fusionando la agricultura sostenible con la producción de energía limpia. Este enfoque de doble uso de la tierra implica la instalación de paneles solares por encima de los cultivos, permitiendo el aprovechamiento de la energía generada para abastecer la explotación agraria o venderla a las grandes compañías eléctricas. El concepto no quiere limitarse únicamente a la agricultura. La ganadería también busca incorporarse a la revolución energética fotovoltaica.
España, con su vasta extensión de pastos y abundante luz solar, se encuentra en una posición ideal para explorar esta tendencia. Por eso, el Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (CITYTEX) ha lanzado la iniciativa PASTOREO-FV, que tiene como objetivo estudiar la viabilidad de la combinación de la ganadería y la producción de energía fotovoltaica en un mismo espacio.
¿Por qué combinar ambas actividades?
Las ventajas de esta convergencia son notables. No solo se reduce el coste energético de las explotaciones ganaderas, sino que también se mejora su rendimiento. Además, se promueve la sostenibilidad, lo que puede atraer a proveedores y consumidores sensibilizados con el medio ambiente. La utilización conjunta de la tierra para el pastoreo puede aumentar la producción de carne, una contribución importante para alimentar a la creciente población mundial.
El éxito demostrado de la energía agrovoltaica en otros países está impulsando su adopción en granjas ganaderas españolas. La energía fotovoltaica generada en estas explotaciones puede utilizarse para alimentación eléctrica, calefacción, refrigeración e iluminación de la granja, lo que reduce aún más su dependencia de fuentes de energía no renovable.
Los proyectos españoles a la cabeza
Un ejemplo concreto de esta tendencia se encuentra en Andalucía, donde la empresa Statkraft implementó un proyecto de energía fotovoltaica en una explotación ganadera. En esta granja, aproximadamente 1.600 ovejas pastan diariamente entre cuatro instalaciones fotovoltaicas en Alcalá de Guadaíra, Sevilla. Las ovejas cumplen un papel ecológico importante al realizar el desbroce natural y mantener limpio el área alrededor de los paneles solares. Estas instalaciones tienen una capacidad de 50 MW cada una, generando alrededor de 388 GWh al año, equivalente al consumo de 115.229 familias, según Statkraft.
Además, CITYTEX ha iniciado un proyecto para desarrollar dos plantas fotovoltaicas basadas en estrategias de gestión relacionadas con la ganadería extensiva. Estarán ubicadas en Extremadura, y los datos recopilados en estos ensayos servirán como modelo para futuras implementaciones en otras comunidades autónomas. Este proyecto podría allanar el camino para un futuro donde la producción fotovoltaica y la ganadería convivan de manera generalizada, creando un entorno más sostenible.
