Las malas hierbas roban espacio, luz y nutrientes a nuestros cultivos. Incluso facilitan la propagación de plagas. Por eso, en la carrera de la Agricultura 4.0, se están buscando soluciones innovadoras para acabar con ellas. Una empresa estadounidense ha desarrollado un sistema de láseres de CO2 para tractores que acaba con ellas de un disparo.
Empezó con un robot desbrozador y autónomo
Esta empresa ya disponía de un robot en el mercado con un funcionamiento similar. Cuenta con cámaras, tecnología de inteligencia artificial impulsada por NVIDIA, sistemas de deep learning y, por supuesto, tecnología láser de CO2. Con una potencia de 150 W y una precisión de 3 mm, dispara cada 50 milisegundos. Además, sus sensores LiDAR sortean todos los obstáculos a su paso.
Este robot avanza a una velocidad de 8 km/h, cubriendo entre seis u ocho hectáreas. Esto significa que acaba con hasta 100.000 malas hierbas cada hora, veinte veces más que lo que un ser humano es capaz de hacer a mano o con herbicidas.
Un implante para tu tractor
Ha demostrado tan buenos resultados eliminando las malas hierbas y la degradación de la tierra que han querido mejorar el sistema. Han desarrollado un nuevo dispositivo que se acopla en el tractor. Cuenta con 30 láseres, triplicando los del robot, con los que en una hora es capaz de erradicar el doble de malas hierbas.
Se calcula que ahorra hasta un 80% de los costes originales del manejo de maleza. Gracias a esto, se puede amortizar el precio de esta tecnología en un periodo de 1 a 3 años, dependiendo de su uso y el tamaño de la explotación.
Con estas tecnologías logramos suelos más saludables, ya que no necesitamos hacer uso de fitosanitarios. Conseguimos ahorrar en los gastos de la compra de estos químicos y de mano de obra. Además, reducimos el tiempo dedicado a esta tarea. Con la innovación, todo son ventajas.
Imágenes: Carbon Robotics