La población mundial crece cada año, así como la demanda de alimentos. Sin embargo, el sector agrario sigue sufriendo problemas acarreados por la falta de mano de obra. En la industria de la oliva, deben hacer frente también a la climatología adversa y la inflación. La Agricultura 4.0 pretende poner soluciones. Es por eso que la automatización del campo está cada vez más normalizada. Las máquinas selectoras, o robots clasificadores, se extienden entre las explotaciones agrarias.
Máquinas selectoras de aceitunas
Las máquinas selectoras de aceitunas son una herramienta vital en la industria de la oliva. Se utilizan para clasificar las aceitunas por tamaño, color y calidad, lo que permite a los productores de aceite de oliva obtener un producto de mayor calidad y mejorar su eficiencia en la producción.
El proceso de selección manual de aceitunas es un trabajo tedioso y lento. Consume una gran cantidad de tiempo y recursos humanos. Además, es difícil lograr una selección consistente y precisa. Con la introducción de las máquinas selectoras de aceitunas, los productores pueden reducir significativamente el tiempo y los costes asociados con la selección manual.
¿Cómo funcionan estas máquinas?
Dependiendo de la máquina automatizada que usemos, utilizan una combinación de tecnologías para medir el tamaño y el color de las aceitunas y determinar su calidad. Las aceitunas se cargan en la máquina y se transportan a través de cintas y cribas que las separan según su calibre y forma. Luego, se someten a un análisis de calidad utilizando sensores de imagen y láser para determinar si están maduras y libres de defectos y enfermedades.
Una vez que las aceitunas han sido clasificadas, se pueden utilizar para producir diferentes grados de aceite de oliva o dedicarlas la producción de aceituna de mesa.
Razones para utilizarlas
Entre sus principales beneficios, estas máquinas pueden mejorar la seguridad en la producción, liberando a los trabajadores de las tareas más tediosas que, a menudo, causan lesiones. Además, mejoran la calidad del producto final gracias a su alta eficiencia en la selección por color y su alta capacidad de procesado. Pero, sobre todo, destaca la reducción de los costes asociados con la selección manual. Con la automatización, conseguimos un importante ahorro en la mano de obra y del espacio requerido.
¿A qué esperamos para mejorar la calidad y la eficiencia de nuestra producción?