Cada vez más, los consumidores están interesados en conocer de dónde vienen los productos que compran y cómo se han producido. La trazabilidad es como una cartilla de nacimiento que nos proporciona toda la información sobre un producto, desde su origen hasta su composición. Es especialmente útil para detectar posibles alergias e intolerancias causadas por el contacto con otros alimentos. También nos ofrece detalles sobre el transporte y las condiciones ambientales a las que ha sido expuesto.
¿Cómo podemos hacer que este proceso sea más completo y confiable?
La clave: blockchain
La tecnología blockchain se está empezando a utilizar para mejorar la trazabilidad gracias a su inmutabilidad. Una vez que se registra algo en el blockchain, no se puede modificar. Cualquier cambio quedaría evidenciado y rompería la cadena. Por lo tanto, es una tecnología perfecta para evitar el fraude alimentario.
Además de mejorar la trazabilidad, el uso de blockchain ofrece una mayor transparencia y seguridad en la cadena de suministro. Para los productores, es de gran ayuda, ya que pueden demostrar la calidad y el origen de sus productos, ganando así la confianza de los consumidores y mejorando la reputación de la empresa. También facilita la identificación y resolución de problemas de calidad o cumplimiento normativo, lo que reduce los costes asociados a estas cuestiones. En caso de una intoxicación alimentaria o un lote defectuoso de productos, se pueden localizar de manera más eficiente.
¿Cómo recopilar estos datos para la trazabilidad con Blockchain?
Para recopilar estos datos, se utilizan principalmente sensores distribuidos en toda la cadena de producción. Estos sensores registran datos sobre las condiciones de crecimiento, el control de plagas, las condiciones hídricas y la temperatura en el almacén. Son fundamentales para la trazabilidad de un producto.
Otra tecnología relevante en este campo son los softwares agrícolas. Existen aplicaciones que monitorizan de forma sencilla los recursos e insumos utilizados en la cadena productiva de una cosecha. Estas aplicaciones ofrecen una gestión centralizada y nos permiten registrar datos sobre la mano de obra, la maquinaria, las fuentes de la cosecha o el tipo de producto. De esta manera, se guardan datos importantes sobre el origen, composición, ubicación y trayectoria de los productos.
Además, estas aplicaciones ofrecen un acceso rápido a los datos de las plantaciones e interpretan los mismos a través de gráficas y otras herramientas visuales. Con estos sensores y aplicaciones innovadoras, la trazabilidad se convierte en una herramienta poderosa para mejorar la seguridad alimentaria y la confianza en toda la cadena de suministro.
