Al principio, el objetivo de este sensor era optimizar el uso del agua en las granjas. Pero han encontrado otra utilidad: es capaz de detectar enfermedades en el ganado al analizar los patrones irregulares en el consumo de agua.

El futuro de la agricultura pasa por usar drones para aplicar fitosanitarios. En Brasil han querido ir un paso más allá y han desarrollado un dron-avión que pulveriza hasta 70 litros a 120 km/h.

Las heladas han vuelto a la península, dejando más de 18.000 hectáreas siniestradas según Agroseguro. El viñedo ha sido el principal cultivo afectado. ¿Qué puede hacer la innovación para proteger los cultivos?

Geneaseas puede acabar con la contaminación del agua. Es un robot que absorbe los plásticos y otros restos de las lagunas y los puertos. Algo esencial para purificar el agua que se usará para el riego agrícola.

Existe una planta que, al mojarse y colocarse en la tierra, lleva a cabo un “sistema de autoenterramiento”. Un equipo de investigadores ha diseñado un portador de semillas que imita a este sistema para reforestar bosques.

La robótica y la automatización quieren hacer frente a la falta de mano de obra agrícola. Para ello, han diseñado a BERRY, un robot para los invernaderos de fresas que cosecha con gran precisión.