Cada vaca es indispensable en la producción ganadera, pero es muy difícil controlarlas y monitorizarlas individualmente. La tecnología está trabajando para encontrar soluciones que hagan este trabajo más fácil. Ya hemos hablado de alguna, pero ahora la innovación ha dado un paso más allá. Han logrado desarrollar un pendiente inteligente que no solo mejora la salud y la producción de las vacas, sino que también optimiza los procesos y reduce los costes asociados.
Cuida de la salud y la alimentación de la vaca
Se llama SMARTBOW. Se coloca en la oreja de la vaca para recopilar información clave de cada animal en tiempo real. Con ello, podemos averiguar si la vaca tiene un problema de salud y cuándo es el mejor momento para actuar. Al rumiar, la oreja de la vaca sigue un patrón de movimiento característico. El pendiente analiza estos movimientos y genera alertas sobre la salud del ganado. Algo muy útil para el veterinario y el ganadero.
Según sus desarrolladores, este sistema cuenta con una precisión del 97%. La alimentación de una vaca es esencial para su salud y al monitorizar la rumia, se pueden identificar problemas y enfermedades antes incluso de los primeros síntomas. Así, SMARTBOW genera dos tipos de alertas distintas: una que aconseja la reducción urgente de la rumia y otra que recomienda una reducción a largo plazo.
SMARTBOW también identifica el celo y la ubicación
La eficacia de este dispositivo no solo se ve en su apoyo a la salud del animal, sino también en la reproducción. SMARTBOW puede identificar el celo, lo que incrementa las posibilidades de inseminaciones exitosas y disminuye la mano de obra necesaria para este proceso, reduciendo los costes relacionados.
Además, igual que los collares de los que ya hemos hablado en otras noticias, este pendiente rastrea la ubicación exacta de cada vaca constantemente. Facilita la localización y el seguimiento del ganado, especialmente de aquellos que requieren una atención urgente.